Una de las frases más utilizadas por los entrenadores durante el Winners 2019, ha sido: jugadoras muy entrenables.
Particularmente creo que las jugadoras no entrenan, se entrenan; los entrenadores debemos enseñar y guiar en el aprendizaje, pero el que entrena es la jugadora.
Los entrenadores debemos dotar a las jugadoras de herramientas para que sean mejores y más eficaces, ser facilitadores para que extraigan de su interior todo lo que poseen, y que puede ser que desconozcan.
Escuchamos con demasiada frecuencia la palabra talento; evidentemente hay jugadoras que nacen con una genética coordinativa y condicional diferente; en otras jugadoras estos genes no se activan o no se expresan, por lo tanto, tendrán que invertir bien los recursos que tienen y, ¿ cómo lo conseguirán ?: con entrenamiento.
Hay un factor determinante que influye en esta activación selectiva: el entorno.Uno de los componentes del entorno es la educación, la cual, modulará nuestra genética y podrá llegar a convertirse en talento.
Otro de los factores del entorno: es el cómo, el qué, el por qué definimos los talentos no habituales, los que no se ven: sentir el que me faltan cosas para ser mejor; ser altruista; sentir el reconocimiento de mis compañeras, adversarias y entrenadores; entender nuestras limitaciones, que no quiere decir que nos conformemos; pero especialmente: el disfrutar aprendiendo y jugando.
En el Winners intentamos crear este entorno distinto: ” cuando mejoras un poco cada día, a final ocurren grandes cosas “.
I’M AFRAID TO JUMP: JUMP !!!
